- ARCHIVO DE SONIDO PARA MÓVILES -
La matanza en Fuencaliente- archivo de sonido-
Al acercarse el invierno,
La matanza en Fuencaliente- archivo de sonido-
Al acercarse el invierno,
ya vacíos los
tinajones,
se prepara la
matanza
y se empiezan
las cocciones
de arroz,
papa y calabaza.
Tras muchas
preparaciones,
la mañana en
que al cochino
se le
infrinjan las lesiones,
antes del
amanecer,
los que serán
anfitriones,
lo
tendrán todo dispuesto
y encenderán los fogones.
Después de tomar café
y darse unos
calentones
que
despejarán el sueño
y
quitarán tiritones,
el dueño de
la matanza
repartirá comisiones,
para que
todos aprendan
cuáles serán
sus funciones.
A solas, a su mujer,
le da algunas
instrucciones.
Tú recogerás la sangre,
que con
tantos salpicones,
no quiero que
de la calle
se llenen de
lamparones;
y para toda
la gente,
que haya
muchas atenciones.
El hombre agarra el cuchillo,
le da algunos afilones
y
dirigiéndose al guarro
inicia las
agresiones.
El cerdo mientras la brega
causa algunos
desollones
a aquellos
que lo sujetan,
por dar
tantas convulsiones.
Una vez que ya está muerto,
después de
las abrasiones
para quitarle
el pellejo,
comienzan las incisiones
del maestro
carnicero;
y también las
hinchazones,
pues de los
lomos del guarro
cuatro o
cinco medallones
se cortarán “pa” somarro;
y después con
los pulmones,
un buen moje
de asadura
se servirá a
los peones,
que tras unas
buenas migas
con sus
pimientos ronchones,
y un cafelito
con pastas
se pondrán como tejones.
Pero viendo la regenta
cesar las
obligaciones
con motivo de
la fiesta
y el circular
de porrones,
acelera los
trabajos
soltando un par de sermones.
Primero dice a los hombres
que no beban
tanto vino,
o luego
estarán pintones,
y deben tener
cuidado
con el trato a los jamones,
al menos
hasta el momento
de entrarlos
en salazones.
Que después
se ponen malos…….
y “to” son
lamentaciones.
que con
tantas diversiones
no habrá
bodrio ni habrá aliños,
ni tampoco probaciones,
y quiere
dejarse hechos
chorizos y
salchichones.
con un par de
sofocones
consigue
hacer su matanza